jueves, 30 de octubre de 2008

tanto celeste para echarse encima.

qué bien que la estoy pasando.

y pesar de estar al horno con todo, muy al horno, y de tener quichicientas cosas en la cabeza, tener tiempo de irme a estudiar al sol, de salir a tomar un helado, de ir al teatro mucho un montón, de escuchar música, de cantar, cantar, cantar, con la necesidad de la primera vez, del rato para la cerveza con amigos, para el mate con galletitas, de hamaca y guitarra y de (sí, ahora todo lo voy a relacionar con él) autocondicionar al máximo mi tiempo -salve el día en que acuñé ese término-.

estar haciendo un montón de funciones, estar armando un espectáculo de la hostia, cantar la viuda el sábado en la peña, preparar un super juego para el tincunaco, recibirme en menos de un mes en el aula magna de medicina, ver de la manera más tangible lo genial que es el laburo en el hospi, cortar la calle y que al lado mío esté mi profesor, mi profesora, mi vicerrector, demostrando que la gente que me está enseñando también está abierta a aprender de mí, y, al fin y de una vez por todas, rodearme de gente que cree que lo hago vale, que lo que hago es lindo, que lo que hago está bueno, y como si fuera poco, hasta me sale un poco bien.

y que bien bien que me hace tener amigos como los que tengo. que vayamos a sacar entradas para las cosas que nos gustan. que les diga necesito una caja, y me digan bueno, ahí te la llevo. que les pida que me encuentren una noticia, y me traigan millones de diarios. que les diga que corto la calle porque creo en una mejor educación, y vengan a cebar mate y tener la bandera. que les pida un traje de enfermera y revuelvan todo el placard. que les diga que algo me anda molestando después de que me dijeron chau, y se queden una hora más hablando conmigo. que se hagan ratitos que no tienen para ir a hamacarse y leer huizinga con el palo borracho florecido. que me aten los cordones, o en su defecto, me tengan de la rodilla mientras me los ato yo. que me digan "sos una artista, juli".


y unos días de sol, que dios, rajan la tierra.
tanto, tanto celeste.

1 comentario:

Tatiana Julia Verrastro Slaibi dijo...

y estar viendo czerny.
y un interludio con unas síncopas que dan miedo, mucho miedo.
ja, no cualquiera.