utilísima.

y estas son las cosas que me hacen sentir bien.

porque sí, que me siento que no sirvo, que no hago nada bien, qué va, que tengo la autoestima por el piso.


y me peleo con mucha gente, y hablo doscientas horas por teléfono, y uso horas que claramente no tengo. pero esta semana, los chicos del merendero El Ombú de la Villa Amancay, van a tener sus vacunas. y todo se debe a un par de horas de mi vida.

y ahí es cuando tengo la autoridad para decirle a toda la gente que me dice inconcientemente no servís, no te sale, no podés, sos menos, no alcanzás, que a ver cuán productivas son sus horas.



pd: que la músiquita de espera de la intendencia de Almirante Brown sea la canción que estoy preparando en piano para el exámen, fue un flash. (igual al minuto 148 que me tenían ahí dejó de serlo).