miércoles, 24 de junio de 2009

no antic i p a r s e.

quiero que por un rato no corran los relojes. llorar un poco acurrucada en un hombro que me conviden. después reírme acompañada, esas risas sin sentido, esas en que los nudos de angustia que se me hacen en el pecho y la garganta viajan hasta los cachetes para deshacerse. después comer chocolate, si es marroc y son muchos, mejor.